Enrique Gómez Carillo

(Imagen extraída de la wikipedia)

Debo a Enrique Gómez Carrillo la idea de la llegada de Gastón a Madrid. Según cuenta en el libro tercero y último de sus memorias, La miseria de Madrid, le ocurrió algo muy parecido. Le vieron llegar a la estación del Norte hablando en francés y acompañado de una mujer muy elegante y una docena de improvisados intérpretes se disputaron el honor de llevarlo a un hotel. 

Aunque no es tan conocido como Ruben Darío, tuvo una vida apasionante. Gómez Carrillo nació en Guatemala, pero vivió casi siempre en Europa. Ejerció de diplomático, de crítico literario, de escritor y, sobre todo, de cronista. De hecho, en su época, fue considerado "El príncipe de los cronistas". Vivió en París donde conoció a Verlaine, a Oscar Wilde, a Sawa. A todos ellos los retrata en su libro Esquises.

Fue un gran seductor. De hecho, el libro La misera de Madrid se lo dedicó a Raquel Meller, conocida cantante y actriz española, con la que estuvo casado, y a la que retrataron pintores como Julio Romero de Torres o Joaquín Sorolla. 

Durante años circuló en Madrid el rumor de que fue Gómez Carrillo quién entregó a los franceses a Mata Hari por culpa de los celos de Raquel Meller.